EL VALOR DE LA FAMILIA
La pandemia nos dejó una gran lección sobre el
valor de la vida, la salud y la familia. En los inicios del confinamiento
obligatorio era muy conocida la frase: “Quédate en casa”, dando indicaciones
que el lugar más seguro era el hogar.
Esta frase que se hizo famosa en todo el mundo,
era una forma de vida en los tiempos antiguos donde la familia representaba el
lugar de formación, de educación. Como no existía demasiada distracción, el
hogar era un sitio para compartir y de alguna u forma era un lugar seguro.
Ahora que estamos en plena era digital, donde
las relaciones son mas virtuales que naturales, la familia tiene que
fortalecerse cada vez mas y prepararse para la nueva normalidad.
Recuerda ud. la dura situación que pasaron los 33
chilenos que quedaron atrapados en una mina 700 mts. Bajo tierra durante 70
días?, según los testimonios de los sobrevivientes lo que les mantuvo con ganas
de vivir y luchar era la familia, cuando hubo como introducir una cámara la
sola conversación y comunicación despertó el ánimo y pudieron soportar hasta
que los rescataron.
Definitivamente la familia es el motor que
mueve a una familia y gracias a ella podemos seguir sobreviviendo.
Entonces nos preguntamos si la familia es tan
importante porque el dia de hoy existe tanta violencia en casa, porque aumenta
el maltrato infantil, porque siguen divorciándose, será que tenemos que
perderla para valorarla. Creemos que no.
Lo que pasa desde mi perpectiva es que hemos
dejado a un lado los principios que rigen a la familia, otro de los aspectos
que perjudica a la familia es el hecho de no educarnos en valores y lo mas
grave es que no hemos pedido la ayuda a Dios para que no dirija.
La familia por si sola no va ha mejorar tenemos
que ser intencionales, tenemos que dejar a un lado el orgullo, el egoísmo que
es lo que rompe toda relación, tenemos que dar un valor más alto que le da la
sociedad a la familia y eso lo podemos logar solo revisando el manual de
instrucciones que tiene cada familia y es la familia.
Recordemos que Dios fue el que diseño la
familia, con la creación de Adan y Eva y dejo claramente e mandato de dejar a
padre y madre y unirse a la mujer para que sean una sola carne, no olvidemos
que también fue Dios quien escogió a un hombre llamado Abranm y su familia para
empezar una nación y también debemos hacer memoria que después del diluvio fue
Noe y su familia que empezaron con el proyecto de poblar la tierra. Es decir
que los propósitos de Dios es bendecir a la familia y busca su verdadero
bienestar y la auténtica felicidad.
Por un momento hagamos un alto a nuestras
actividades y afanes diarios y preguntémonos. ¿Estamos valorando a nuestra
familia?, le estamos dando la atención que se merece, somos conscientes que
ellos son importantes, cuando empecemos a darle el valor que se merecen a los
nuestros allí empezará una nueva forma de vivir. Que Dios bendiga a la familia.
Cuando iniciamos un nuevo Proyecto, un emprendimiento empezamos con mucha emoción, con alegría y entusiasmo esto se debe a que como no conocemos lo que va a pasar el dia de mañana estamos seguros que nos va ir de lo mejor.
Pero una vez iniciada la aventura surgen lo que
no podemos evitar, los conflictos, problemas malos entendidos y discusiones,
nos visita sin llamarlo el desánimo y buscamos la forma más fácil de afrontarlo
y terminamos dejando lo que empezamos.
Mi pregunta sería que pasa si un niño que esta
empezando a gatear e intenta caminar y se cae, será que ya no podrá caminar
nunca más, que esta este pequeño vuelve a intentarlo hasta que sus piernas sean
fuertes y luego en base a su corta experiencia si se cae se levanta hasta que
por fin se encuentra no solo caminando sino corriendo.
Esta actitud nos lleva a pensar que los problemas son indispensables para mejorar nuestra personalidad y ayudar a fortalecer nuestro carácter. No debemos huir de los problemas debemos enfrentarlos con sabiduría.
Comentarios
Publicar un comentario